Yo no manyo a la gente que se ufana
y que aconseja con soberbia lunga,
yo me rebusco solo, no hago drama,
la fija ganadora, pa' mí es punga.
¿Quién conoce del alma el laberinto?
pa' aconsejar caminos o senderos,
sin comprender que hay un sentir distinto
y el acecho de broncas y entreveros.
Ya transité la tarde de mi día
y la nostalgia de la infancia tira,
busco en el tiempo la respuesta mía;
Y el tiempo me responde: yira, yira,
todo es un cuento, que al final te guía,
la vida es como un sueño, se las pira.