Hamac Caziim decidió, en el año de 1995, recrear la música tradicional comca`ac con la música rock. El nombre de la banda se refiere a un fuego divino; esa llama sonoriza e interviene eléctricamente los cantos tradicionales, con reconocimiento del Consejo de Ancianos y de la comunidad comca`ac, así como de la escena roquera sonorense (sic).
Pero la lucha por motivar el interés de su gente para que valore su tradición, usos y costumbres no termina ahí. El grupo ha realizado ya presentaciones en distintos foros del país…”.
Ahora, ¿qué resulta de la combinación de la tradición indígena con guitarras eléctricas a ritmo de rock duro? Escuchar a Hamac Caziim es como asistir a un concierto en el que oficia un viejo chamán con espíritu de Caballo Loco. En los cinco minutos de Baico, baico, por ejemplo, se siente la energía (valga la palabra) que daba vida a las canciones de Ramones, así de punks y primigenios son estos músicos. Sí, hay canciones que podrían “ambientar” una ceremonia indígena, en especial por los cantos, pero que difícilmente sus asistentes celebrarían por ese su sonido sucio, duro. Probablemente el disco se disfrutaría mejor si se escucha en una noche estrellada, fría. Y solo.El Instituto Sonorense de Cultura aportó parte del dinero para su producción y, si lo desean, en sus oficinas lo consiguen, o en el Museo de Culturas Populares e Indígenas.
Este es sin duda un gran disco, super recomendado