Tragicomedia satírica con formato postal
por Marga Alsina
El miércoles llamó Nicasio Pelayo, el "profesional" que puso el anuncio en la facultad para la investigación. Me dijo que quería verme personalmente. Para ello tenía que ir hasta la Ciudad de los Periodistas. Como es una hora de viaje, más otra que hubiera necesitado calculando que seguro me perdía, le dije que me anticipara de qué se trataba el asunto porque mis horarios eran complicados y de no interesarme me parecía que no tenía sentido semejante viaje. Agregué que trabajaba, que mi sueldo era relativamente bueno y que si cambiaba de trabajo sería por algo infinitamente superior. Que, por supuesto, el hecho de tratarse de un trabajo intelectual era el motivo principal de mi inquietud, pero que existían circunstancias concretas y materiales que me comprometían económicamente y que no podía desatender aun tentada por trabajos que me satisfarían más. El señor me dijo que el sueldo era de xxxxxxx pesetas al mes y que consistía en elaborar con él su memoria para la oposición a una cátedra de Economía. Exigía una licenciada en filosofía (no un licenciado) sobre todo porque la primera parte de la misma, que consistiría en la epistemología de su materia y en un enfoque general de la filosofía de la ciencia. entre tira y afloja, quedamos en que el día viernes el señor pasaría por mi casa. Abro la puerta y aparece ante mí un gordito de traje marrón. Lo invito a pasar y lo primero que elogia es el bulín. Tomo asiento y comenzamos a conversar. Voy a reproducir el diálogo textualmente, pero no en su totalidad porque no pienso estar toda la noche escribiendo. Y, por otra parte, el hacerlo exigiría un esfuerzo de memoria inútil. Pido a los santos del cielo...
Ilustración de J. Caro
- Lindo pisito... Con razón no está dispuesta a renunciar a ciertas cosas... ¿Sabe? Yo tengo un hermano argentino, que nació en la provincia de San Juan por accidente (accidente imperdonable de la naturaleza, como verás más adelante) ... Por eso le tengo simpatía a los argentinos... La cosa está mal allí... Claro, la inflación... Sobre todo después de Perón... ¿Usted qué opina de Perón? ¿Era en verdad fascista o no?
- Señor, el problema del peronismo fue la falta de una estructura ideológica clara. Y en toda plataforma política donde se confunden estrechamente pautas a seguir, es fácil encontrar aspectos claramente fascistas y aspectos claramente socialistas. Pero esta distinción es fácil de hacer a nivel programático, tiene consecuencias desastrosas en lo que a operatividad se refiere. De todas maneras fue un estadista que despertó la conciencia obrera y permitió a la clase trabajadora el acceso a ciertos ámbitos que en Europa son prohibitivos para los trabajadores. Yo soy hija de un obrero y llegue a la universidad sin mayores dificultades, cosa que aquí en España no es posible...
- ¿Usted la hija de un obrero? Qué va ser la hija de un obrero tan elegante, tan distinguida y tan educada. ¿Qué obrero es su papá?
(Miré la foto de mi viejo y traté de imaginar la respuesta que él le hubiera dado. Una fuerte tentación de risa se apoderó de mí. Inmediatamente pensé en el tríptico de opiniones que debí escuchar de mí en los últimos tiempos: lo fina que fui de chica, el qué hubiera (habría) sido de mí de haber nacido en otro medio y ésta y ya no me aguanto más, a vos te lo confieso, pero quiero que me jures que no se lo vas a decir a nadie: soy la bisnieta de Anastasia, heredera al trono de Rusia. Soy la mujer que unirá a los pueblos de las ahora repúblicas socialistas. Es más: ¿no te resulta sugestivo que el Príncipe de Gales no tenga novia? Un contrato nos une El sueño de mis antepasados se cumplirá: las posiciones geopolíticas más estratégicas, el archipiélago y la gran extensión de territorio en Asia. Europa caerá bajo mis garras; ¿por qué te parece que mi futura suegra no les devuelve Gibraltar a los gallegos? ¿Y la invación de Afganistán, qué? Me están preparando el terreno: el dominio del Mediterráneo y del Golfo Pérsico. Y además la soberanía del pueblo inglés... oh yes. Everybody will be surprise...)
HIH Grand Duchess Anastasia
- Mira... ¿te puedo tutear, no? Yo soy economista. He traído este trabajo para que lo leas. Esta premiado, esto..., con lo que aquí en España se denomina "Premio Nobél de economía"... Pero claro a mí me falta esto de la filosofía... Oye, ¿la de la foto eres tú, verdad? Qué guapa eres... Y como te decía... con la ayuda de dios, ganaré la oposición... y la tuya, claro... Bueno, digo dios por costumbre ¿sabes? Por que si es cierto lo de Adán y Eva somos hijos de un ancestro...
- Sin lugar a dudas, todos tenemos ancestros.
- Si, claro, lo que yo siempre discuto con sacerdotes fue que Adán y Eva tuvieron dos hijos ¿no? Caín y Abel, y ninguna mujer... O a lo mejos tuvieron una niña y la Biblia no lo dice. Pero aún así: mira con la madre o con la hermana es un ancestro, y no hay sacerdote aquí en España que lo discuta. Dime ¿vives sola, no?... Tendrás un amigo... ¿Puedo ver las fotos? No me digas nada, éste es tu amigo...
-Justamente, estoy maravillada ante su profunda intuición...
(Esto lo dijo señalando la foto de mi pobre primo Mario; Mimí, he pecado con mi afirmación, con mi pensamiento he cometido un ancestro con mi propio primo hermano, Mimí, de chicos nos vestían iguales con el traje de marinerito, nunca jugamos al médico, éramos como dos hermanos... Y fijate lo que he tenido que hacer...)
Mario y Marga
vestidos de marineritos
- Oye ¿por qué no me tuteas? - En mi país no se acostumbra a usar el tuteo indiscriminadamente, y si usted no lo toma a mal, señor Pelayo, prefiero seguir tratándolo de usted.
- Pero ¿a tus amigos también los tratas de usted?
- No, a mis amigos los tuteo...
- Claro, yo no soy tu amigo...
- Es una cuestión de educación. He observado en España que aunque el tuteo e común existe un clasismo acentuado. Esta aparente democracia lo mantiene. ¿Qué opina de Adolfo Suárez?
- Mira yo no soy franquista, tampoco antifranquista. En época de Franco, porque yo critiqué a Franco en vida, dije algo que nadie puede discutirme que Franco fue el único que tuvo poder para hacer un país y no lo hizo.
(Esto fue dicho ahuecando la voz con solemnidad y con enunciación enunciativa, es decir, bajando reverencialmente el tono en las últimas sílabas y cortando la musicalidad, algo así como cerrando un capítulo. No te apresures, decidí no preguntarle qué era un país para él por temor a los ancestros.)
-Curiosamente asistimos en este siglo a una regresión en lo que a estructura política se refiere. Los gobiernos vuelven a ser personalistas como hace trees siglos...
- Hostia! ¿Hace tres siglos pasaba lo mismo?
- Sí en el siglo del despotismo ilustrado. Pero al separar la noción del poder temporal del poder de dios, desapareció la figura del rey como un concepto totalizador del Estado, entonces nació la burocracia y la figura de los primeros ministros o cancilleres como Bismarck o Maëternich, que es otra forma de personalismo pero un poco más diluida: el poder queda en manos del rey, pero quien actúa es su representante. Actualmente volvemos al principio: la política de occidente tiene dos nombres: Carter y Europa -que Europa por el Mercado Común-, oriente es Gromiko, Breznev, fue Mao y ahora agregamos el mundo árabe a través de Jomeini...
- Joder! Cómo sábes! Mira, yo no sé nada. Ni de historia ni de literatura. Hice la carrera de periodismo. El aula era pequeña, ¿sabes? Claro estábamos incómodos, uno pegado contra el otro. Cuando había un examen yo le decía al que tenía al lado: oye, dame cuatro ideas... yo las desarrollo... y, claro, esto, uno que sabe escribir... terminé la carrera con el... ¿o la? Hostia, es lo mismo, con el SUMAM CUN LAUDEM...
(Iba a explicarle que con un cum en latín, solo puede ir un ablativo, y que queda mejor decir summa, pero ¿qué podía hacer yo frente a un SUMAM CUN LAUDEM?)
- Señor Pelayo, usted seguramente sabe de historia y no lo reconoce por modestia. La economía está estrechamente vinculada al desarrollo socio-político.
- Por supuesto, yo me manejo mucho con estadística y con sociología...
- Interrelacionado, claro está. La revolución industrial de Inglaterra no puede explicarse desde un punto de vista netamente económico porque no se comprendería.
- Jolines! ¿Qué es esto de la revolución industrial? Oye, ¿quieres quitarte las gafas? ¿Las llevas siempre? Qué ojos más bonitos tienes... Tu amigo te lo dirá ¿no?
- Casualmente no. Debo decirle que es la primera vez que me lo dicen. Además de ser usted muy intuitivo es muy observador.
- Es la posición social ¿sabes? Estoy muy relacionado. Oye, te pago las xxxxxxx pesetas que ganas en el periódico si trabajas conmigo...
- Lo siento, usted me ofrece trabajo por un año. Después sería mucho más difícil para mí.
- Oye, que no, que yo en seis meses te consigo otro trabajo muy superior al del periódico. Mira que estoy muy relacionado... Hagamos una prueba durante un mes... Trabajas dos horas conmigo por la mañana...
- Eso implica para mí el doble, es decir cuatro horas. Debo sumar dos horas de viaje.
- Yo vengo aquí a trabajar a tu casa...
- Eso es absolutamente imposible...
- Claro, tu amigo... ¿Por qué no te lo piensas? Pero a mí me gustaría una respuesta inmediata. Me has caído bien...
- Señor Pelayo, le agradezco todos los elogios que me ha brindado durante nuestra conversación, le deseo también la mejor de las suertes para su trabajo pero no puedo hacerme cargo de él. De todas maneras dada la importancia de su persona y sus relaciones, si llega a enterarse de algo que fuera conveniente para mí, le agradecería me tuviera en cuenta.
- Mira, tú sabes lo difícil que está esto del trabajo... Mucha gente en paro, no hay trabajo ni para los españoles.
- Ciertamente, usted que se maneja en el ámbito de la economía sebe apreciar mucho mejor que yo ese tipo de dificultades. Me alegra haberlo conocido. Adiós.
Marga Alsina