Ayer, tras cometer una serie de errores, le pregunté irónicamente a mi amiga Mónica:
_ Decíme sinceramente, Mony: ¿no te da la impresión de que estoy cada día más lúcida?
Recibí la siguiente respuesta:
- Ah, ma chérie... ¿Qué es la lucidez? ¿Acertarle a todos los botones? ¿Administrar justicia imparcialmente? ¿Abrocharse la camisa sin errarle a los ojales? ¿Cebar mate sin chorrear?
Niet, niet, niet.
Estar lúcido debe ser algo muy parecido a gozar de una revelación: ¡todo se vuelve tan simple! El resto del tiempo estamos tan ocupados en sobrevivir que no tenemos oportunidad de reflexionar acerca de si estamos lúcidos u obnubilados por las circunstancias, los colectivos y el agua para el mate que acaba de hervir.
Ilustración:
Vejo o Vazio da Minha Lucidez...
Foto de ♫Claudia Pinelli♫
